Inversión en logística para la nueva normalidad
Existe un nuevo camino con oportunidades para la industria logística, con el aumento del eCommerce en general,
así como la popularidad de compras online que antes eran típicamente físicas.
En este artículo exploramos las predicciones y tendencias vistas en México durante los últimos meses, las cuales ratifican que la industria logística representa una gran oportunidad de inversión.
Primero queremos hablar del transporte de última milla, que son las entregas de mercancías adquiridas por los compradores hasta su domicilio.
En servicios de última milla encontramos ejemplos de crecimiento evidente en las ciudades más grandes del país. Por ejemplo, Inmobiliare compartió que en 2020 aumentó la cantidad de espacios last-mile cerca de la Ciudad de México, en zonas como Vallejo, Azcapotzalco, Naucalpan, Iztapalapa, Tláhuac e Iztacalco.
Por otro lado, están los nuevos modelos de negocio que dependen de la logística urbana. Impulsados por los patrones de consumo durante el confinamiento. Han surgido ideas como las “dark stores” y las “dark kitchens”, que consisten en tiendas de conveniencia o cocinas adaptadas para satisfacer exclusivamente la demanda de pedidos online. (Servicio a domicilio)
También vale la pena mencionar a las empresas extranjeras que, en el último año, han apostado por México como un país estratégico por su ubicación y potencial de manufactura y nivel de adquisición. Debido a la pandemia de COVID-19 disminuyó el abastecimiento de insumos y el transporte marítimo de carga, por lo que varias compañías de manufactura decidieron instalar una parte de su cadena de suministro en el país para mantenerse competitivas a mediano y largo plazo.
Esto es parte de lo que se conoce como nearshoring y es la tendencia de relocalizar las operaciones de una empresa a un país cercano (por ejemplo, compañías que fabrican en México y proveen a EEUU, en vez de depender de China). Esto resulta más efectivo en términos económicos pero también a nivel cultural y de infraestructura.
Estas tendencias y expectativas de crecimiento pueden compensar con creces la decisión de invertir en logística. Quizá el futuro esté en los viajes cortos de mercancía o en el transporte de materiales para la cadena de suministros dentro del país.
Si decides entrar en la industria logística es importante reflexionar en tener:
- Plan de negocio que guíe tu operación.
- Estructura legal para el tipo de organización que deseas establecer.
- Cálculo de los costos esenciales del negocio.
- Camiones de 3 a 7 toneladas, camionetas y vehículos confiables, determinando qué tipo de vehículo requieres según lo que vayas a transportar.
- Tecnología que te ayude a garantizar una administración de flotas eficiente y segura, brindándote datos para optimizar las rutas y monitorear las tendencias de consumo de combustible, entre otros.
- Suficiente espacio de almacenamiento físico para guardar temporalmente las mercancías que vayas a trasladar.
- Seguros de negocio y vehículos.
- Estructura de precios claros y competitivos.
- Financiamiento cuando sea necesario; recuerda que no necesitas tener todo el dinero de inversión instantáneamente y que, a veces, esto puede permitirte renovar tu flota y tus operaciones con mayor frecuencia.
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